Cómo conquistar a Neko-chan (SOY EL REY PANTERA, NO UN GATO!!)

Capítulo 1: Conociendo a Kumiko y a Neko-chan(REY PANTERA!!!!!!!!!!!)
-¡¡NEKO-CHAN!!-grité otra vez. Sabía que le iba a molestar, pero me encantaba cuando se enfadaba...

-No soy un gato, zorra... Es Pantera.- me dijo, Grimmjow, harto de mi, la nueva arrancar con la que tendría que pasar tanto tiempo, pues le habían ordenado que me enseñara toda Las Noches. De no ser porque era la nueva Espada...La más fuerte, decía Aizen.

-Y yo no soy zorra, sino Tigresa-le susurré al oído de forma sensual-. ¿Quieres comprobar mi fiereza?- le dije pícaramente.

Grimmjow me miró sorprendido por mi indirecta. Y sonrió.

-Mmm...Me gusta la idea.

-Ah...Que pena que te quedes con las ganas, Neko-chan- le dije con una sonrisa malévola.

…........GRIMMJOW..............................

-¡¡NEKO-CHAN!!-gritó otra vez la estúpida nueva...¿Y esta era la más fuerte?

-No soy un gato, zorra...Es Pantera- la odiaba, la odiaba y la odiaba. Aunque era una belleza, con su parte inocente y su parte sexy, era muy molesta.

-Y yo no soy zorra, sino Tigresa- me susurró al oído de una forma que me hizo estremecerme. ¿Desde cuando Grimmjow Jeaguerjaques se estremece por la voz de una mujer, por muy sexy que fuese?-¿Quieres probar mi fiereza?-no me podía creer que me estaba sugiriendo. Ya no me parecía tan molesta.

-Mmm...Me gusta la idea- no veas cómo me gusta...Je je.

-Ah...Qué pena que te quedes con las ganas, Neko-chan- oh, dios mio....Esa chica era perversa. Malévola. Por muy infantil que fuese, me estaba gustando....Pero ahora sólo tenía un pensamieto, y era el de destrozar todo lo que estuviese cerca a zarpazos. ¡¡ME HABÍA HECHO LA PEOR JUGARRETA DE MI VIDA!! Y lo peor de todo...Me había quedado con las ganas. Mierda.

-Niñata estúpida...-susurré. No sabía lo que se me venía encima.

…............KUMIKO...................

-Niñata estúpida...- había dicho Grimmjow. Niñata....La palabra clave. Cuando dijo esto, con una agilidad y velocidad increíble, me subí a su espalda, poniendo mi cabeza en su hombro.

-¿Niñata?-le dije divertida-. Sólo estamos tu y yo aquí, Grimmjow...Creo que estás demasiado cansado...Pero cuando vuelvas a ver a esa niñata, avísame, ¿vale?- le susurré amenazante. Después, le di un pequeño mordisco a su lóbulo.

Me bajé de su espalda.

-Me gustas, Neko-chan-le dije con una sonrisa-. Además, eres muy guapo...y sexy. ¿Seguimos?-le dije, como si no hubiese pasado nada. Después de eso, Grimmjow no abrió la boca más que para mostrarle las habitaciones.

….....GRIMMJOW.............

Esa chica...Me había amenazado...Y no he reaccionado...A no ser que quedarme mudo sea una reacción.

Sentí algo en mi pecho, no sabía que era...¿Miedo? No puede ser. El Rey Pantera no siente miedo.

Capítulo dos: A fastidiar se ha dicho

…....KUMIKO...........

Dios mío...Es tan guapo...Y tan...sexy. No podía parar de pensar en él.

-Tiene que ser mío-dije por lo bajo.

No era sólo su físico...Sino también su actitud...Siempre tan seguro de sí mismo, irrespetuoso, irresistible....

Me había dado cuenta de que no era la única que iba a por él...Muchas arrancares de Las Noches le seguían a donde fuese. Que fans más locas....

Lo peor era que mi dormitorio estaba muy cerca del suyo...Tan cerca que podía escucha perfectamente cómo se...divertía con sus ''amiguitas''. Repugnante. Pero, como yo soy tan yo...Pues me las dedico fastidiándolo. Y no estaba sola en ello.

Había conseguido una especie de amistad con Ulquiorra. Un milagro, pues el Espada era un tipo difícil. Pero aun así, me caía bien. Y era muy guapo. Y como no le caía bien Grimmjow, me ayudaba con mis pequeñas jugarretas. Todavía recuerdo la más grande.


En cuanto escuché la gran orquesta que había montada en la habitación de Grimmjow, llamé rápidamente a Ulquiorra.

-Ulquiorra,¿te sabes bien que tienes que hacer?-le pregunté. Quería que saliese perfecto.

-Si.

Todavía me resultaba increíble que aquel arrancar me ayudase a fastidiar a Grimmjow en sus noches.

-Pues venga. Que comience la función- sonreí malévola.

Fuimos a la puerta de su habitación. Entonces Ulquiorra llamó a la puerta.

-Grimmjow. Soy Ulquiorra- empezó a decir-. Venía a decirte que me dejes en paz. Deja de mandarme cartas de amor. Mi respuesta nunca cambiará. No me gustas y nunca me gustará-dijo con una voz fría e inexpresiva-. Por cierto...Deja de acostarte con mujeres. Sé que lo haces para que no sepan de tu condición sexual.

Funcionó. Ya no había ruido en la habitación. Sólo se escuchó una bofetada. Se abrió la puerta y salió una de las arrancar de Las Noches. Casi no podía aguantar la risa.

No volvimos a fastidiarle una noche. La chica arrancar se lo había dicho a todas las arrancar de Las Noches. Perfecto.

Primera fase de la conquista de Grimmjow: Quitar a las demás de en medio. ¡COMPLETADA!